



Fotografías tomadas con Nikon D90, la última empleado trípode, sin filtros y sin retoques (lo justo unsahrp mask + saturación de color 4%)
Ese día mi compañero Andrés y yo ascendimos a la muela de Segart por la cara Este, descendimos por la opuesta para contemplar desde ese prodigioso balcón como se extinguen las luces naturales dando paso al rosario de luz artificial de Valencia y las pedanías circundantes.
Una grata experiencia para la vista.